Hay muchos momentos en los que la carne es débil, y no me refiero a las piernas flácidas. Estoy hablando de cuando la mente flaquea y se toman decisiones erróneas. Sin ir más lejos muchas de vosotras saldréis esta noche con un vestido de lentejuelas. Sin embargo, la debilidad que pasa mayor factura -especialmente si cobra por horas- es la de comenzar una relación. Así que hoy, 31 de diciembre, he decidido
hacer mi última buena acción del año -la penúltima fue enviar el CV de Pilar Rubio a trabajos de verdad- y abriros los ojos sobre lo horrible que es tener
pareja y las ventajas de la soltería. Muchas
creeréis que escribe esto una seudo Carrie Bradshaw sentada frente al
ordenador en pijama al lado de una tableta de turrón de chocolate Suchard. Nada más lejos de la realidad. Soy una Teresa de Calcuta comprometida con vosotras,
almas perdidas de la creación, a las que ofrezco un poco de luz en esta discoteca oscura que es la vida con este decálogo del single –podría escribir más de diez pero comer me quita mucho tiempo
en esta época del año-. Así estáis a tiempo de cambiar un deseo para cuando toméis en las campanadas vuestras uvas peladas y sin pepitas Cofrusa. Empecemos.
1.-Tu
cama es tuya
Y solo
tuya. Junto con mantas, sábanas y almohadones. La cucharita está muy bien en las
películas en las que los dos enamorados se despiertan a la vez tras haber
llegado también a la vez al orgasmo (ja, ja). Pero en la vida real tú te despiertas
con un brazo encima que te comprime cual boa constictor. Además es muy difícil hacer
el ángel con otra persona a tu lado.
2.-Las
tapas también son para ti
Por si
no te ha convencido lo de la cama –que debería-, está infravalorado comer sin vergüenza las tapas de los bares y gasthofs. Por alguna extraña razón, las mujeres nos empeñamos en hacer pensar a los hombres que no ingerimos alimento alguno, al igual que no meamos, cagamos ni demás
necesidades básicas como comprar ropa. Pero no chicos, ya no estáis saliendo con una muñeca inchable, y aunque os cedemos las bravas,
montaditos, piruletas de parmesano y demás aperitivos la Adele que hay en nosotras rolling in the deep. Así que adiós a llevar el sándwich
en el clutch para comer en el baño y que rule el pincho de tortilla.
3.-Tu
cara estará suave como el culito de un bebé
Por Dios qué mono es el de la Carbonero. Volviendo al tema, la
barbita de tres días es sexy, pero con la de algún hombre se podría exfoliar tu
madre los callos. La soltería te mantiene el cutis perfecto, sin que parezca que te acaban de arrastrar dos manzanas por el asfalto. Aunque he de reconocer que los beards se postulan como el complemento ideal de esta temporada (plus si viene con moñito).
4.-Puedes
conocer otros chicos que te harán abrazar más la soltería.
Como le decía el otro día a David Gandy, cerrarte
en una relación es negarte a compartir tus encantos con el resto del mundo. Algo
muy egoísta y próximo pecado capital de la colección de helados Magnum. Por eso está bien relacionarse con otros hombres para conocer su maldad
y reafirmarte como soltera de oro. Cuidado especialmente con los que te pueden
enchufar profesionalmente. Por normal general solo quieren enchufártela.
5.- Tienes
tiempo para pensar en tus problemas.
Además
de más espacio en la cartera para tus fotos de carnet. Las típicas parejas que
se cuentan todo pierden mucho tiempo fingiendo que les interesa otra persona. La single puede explayarse eligiendo el #ootd o si le gusta más el chocolate Milka con Oreo o con galleta. La alarma de la píldora del móvil se guarda para recordatorios importantes, como que comienza el programa de los vestidos de novia de Divinity. También puede pensar con calma la selfie más favorecedora para subir a Facebook -lo que ahorra muchos collages-, si el monstruo encontrado en la selva de Camboya es real o Photoshop, a quién salvará en Gran Hermano o definirse como guapa o atractiva.
6.-Mejora
tu temperatura corporal
Y no lo digo por los calentones sino por la regulación térmica del
vello (bello en mi caso). La depilación se deja para ocasiones especiales. Así aumenta tu nivel de exigencia cuando conoces a un varón y
mientras puedes experimentar con las posibilidades de tus pelos, como trenzas,
californianas o incluso rastas. Por un sobaquillo comenzó Lucrecia.
7.- Estás más guapa
La soltería es el mejor maquillaje. Por normal general, la gente cuando se echa pareja se apalanca. Para empezar gana una media de 2 a 4 toneladas. Cuando la mitad de los planes se hacen en un sitio mullido es raro que una relación larga no termine con la amputación de algún
miembro por diabetes. Y chicos, siento deciros que el sexo solo quema una
media de 75 calorias. Ni la mitad de ese polvorón que sostienes ahora mismo en la mano.
8.-No
tienes que ver penes
Esas horribles criaturas de la naturaleza allá donde los haya. Poco fotogénicos y peores en persona. El churrillo que le sobró de la plastilina a Dios.
9.-La combinación
de la ropa interior será casualidad.
Tu lencería no
tendrá que impresionar a nadie. Hay total libertad tanto para ponerte el sujetador Manuela como las bragas de
la regla fuera de la semana menstrual. No hay carga mental para combinar cuadrados con encajes o lacitos con hojas de parra. Tu cabeza
puede tomarse un respiro.
10.- No tienes que dar explicaciones
A nadie. El doble tic azul del WhatsApp te resbala. No son necesarias las excusas de dónde has estado, en qué compañía o quién te ha hecho esos chupetones. Puedes merendar tranquilamente con Jamie Dornan o ayudarle a preparar escenas de su película sin estar pendiente del reloj. Eres libre.
Y como argumento definitivo: mejor sola que mal acompañada.
Y como argumento definitivo: mejor sola que mal acompañada.
Feliz 2015 ladys, gays and gentlemans que habéis caído aquí accidentalmente. Os deseo un año lleno de amor propio, piropos y piel hidratada -últimamente los Reyes Magos son clientes VIP de las droguerías-. Y dejaros con el consejo que siempre me da mi madre cuando salgo de fiesta: "Ponte cerca de la salida de emergencia por si pasa algo".
Paz
Me quieres, La
Pepis